La pregunta es… ¿esta es la única manera de estudiar?
Pues claro que no.
De hecho, si utilizas unas buenas técnicas de estudio, y comprendes cómo funciona tu cerebro, te aseguro que puedes estudiar mejor incluso dedicándole menos horas, llevando una vida más equilibrada y compaginándola con tu vida social, tu trabajo o tu familia.
Esto no es cuestión de magia, ni de trucos raros, sino de conocer las técnicas y sistemas adecuados.
Estos métodos existen desde hace décadas y que, aunque no se enseña en nuestra desfasada enseñanza tradicional, son utilizados por los mejores estudiantes del mundo y por los atletas mentales que participan en competiciones de memorización.
¿Y cómo puedes hacerlo?
Bueno, permíteme presentarme y demostrártelo en directo: